Sem comentários, pois já são muitos os abaixo transcritos...
Paulo Roberto de Almeida
Revista América Economia, Dom, 16/06/2013 - 18:56
El desabastecimiento se ha convertido en parte de la vida de las personas en Venezuela.
AméricaEconomía.com habló con venezolanas y venezolanos de distintas profesiones que diariamente deben hacer grandes esfuerzos para conseguir los productos que necesitan.
El desabastecimiento es un problema que golpea a los venezolanos en la actualidad. El gobierno de Nicolás Maduro ha hecho varios anuncios para combatirlo y denunciado que la oposición estaría detrás de estos hechos. Mientras, la gente continúa haciendo esfuerzos por conseguir los bienes que requiere y muchos critican al Ejecutivo por la situación.
AméricaEconomía.com conversó con venezolanas y venezolanos de distintas profesiones que se enfrentan a diario con esta realidad. Conozca aquí sus testimonios:
Nombre: Roxana Alicia Carrasquel Moreno
Edad: 42
Ocupación: Gerente Comercial de una Clínica en la Ciudad de Maturín
Lugar de residencia: Maturín. Estado Monagas. Venezuela
"Si consigues un producto debes realizar una mega cola de dos a tres horas, y obvio que no todos tenemos tiempo para eso, por eso compramos los productos a un precio triple para ahorrarnos esa situación, y si conseguimos el mismo producto en el supermercado lo volvemos a comprar y lo almacenamos"
“Lo que está viviendo actualmente mi país es tan triste y lamentable en todos los aspectos, ya sea económico, social, cultural, político; y lo más grave es el desabastecimiento. Esto viene sucediendo desde hace tres años, aproximadamente, donde algunos artículos como la leche, el café y la azúcar desaparecían del mercado -cuando no había café aparecía la leche- y así sucesivamente fue ocurriendo hasta que el año pasado, como en agosto, empezaron a desaparecer más productos como la harina pan y harína de trigo, aceite, papel sanitario, carnes, toallas sanitarias, pasta de dientes, mantequilla, huevos, etc. Esto ha provocado que los vendedores informales vendan estos productos de primera necesidad a un alto costo. Estos vendedores consiguen la mercancía en otras ciudades y también con fuertes contactos con los distribuidores del gobierno, los cuales distribuyen a los Mercados Socialistas donde venden por persona una cantidad limitada. Las veces que viajo a la capital, Caracas, que me queda a ocho horas, hago mis compras de harina, azúcar, papel sanitario, leche, aceite, mantequilla y café. Estos y más productos se consiguen en la capital, ya que el desabastecimiento es en todos los Estados de Venezuela, menos en Caracas, o aparentan que no lo hay. Para realizar un mercado familiar debo recorrer todos los supermercados y eso no garantiza que consiga los productos. Además, si consigues un producto debes realizar una mega cola de dos a tres horas, y obvio que no todos tenemos tiempo para eso, por eso compramos los productos a un precio triple para ahorrarnos esa situación, y si conseguimos el mismo producto en el supermercado lo volvemos a comprar y lo almacenamos. Es deprimente la situación cuando observas a las personas realizando mega colas, desde las 4:00 am en los Mercados Socialistas para que les vendan productos limitados y a veces salen con solo dos o tres productos. Es humillante e impresionante. Hasta en nuestros hogares racionamos los alimentos por la escasez. Cada 30 días los precios suben. Esto ha ido agudizando y realmente esperamos lo peor. Se ha formado una redes de comunicación por las redes sociales, amigos y familiares, donde nos mantienen informados dónde podemos encontrar los productos en el momento que llegan. Narrar esta situación me llena de cólera y tristeza, nunca pensé que mi país llegaría a una situación así; muchos decían que Venezuela iba vía a una Cuba y en los actuales momentos estamos viviendo una situación igual. La mala política aplicada por este gobierno chavista nos está llevando a la ruina: no existe calidad de vida, la inseguridad aumenta cada día, malos servicios hospitalarios, de luz, agua, vialidad, transporte. Venezuela está viviendo una de sus peores crisis, el país se está cayendo a pedazos”.
Nombre: Miguel Guzman Porras.
Edad: 30 años
Ocupación: Abogado con Magister en Gerencia Internacional de Recursos Humanos.
Lugar de residencia: Maturín. Estado Monagas.
“Dejé Venezuela en 2011 luego de residenciarme un año y medio en Londres, Inglaterra, mientras realizaba mis estudios de postgrado y regresé en febrero de 2013 encontrando una gran diferencia no sólo en el incremento del costo de la vida diaria, sino del aumento de los niveles de criminalidad y la sensación de inseguridad, muchos vivimos casi paranoicos. Recién llegando, el gobierno implementó una devaluación de nuestra moneda y no soy economista, pero se dice que es de 46%; y en menos de un mes, todos los productos (consumibles y no consumibles) aumentaron su valor en casi 50%, sin que se realizará un aumento salarial adecuado y frente a un país donde no existen oportunidades de empleo y reina el comercio informal. En casa a todos nos afecta el desabastecimiento. ¿Cómo se vive? Mi madre como buena jefa de la casa, se encarga de comprar los alimentos, sin embargo, todos tenemos una regla: ninguno hace fila para comprar nada. Mientras no se consigue algo, se utiliza algún producto que lo sustituya, es decir, se come otra cosa. Con respecto a productos digamos “necesarios”, todos hacemos rondas por la ciudad, y si alguien no está de ronda y por casualidad está en un supermercado y encuentra algún producto “necesario”, se compra la cantidad que el establecimiento permita, aunque en la casa ya tengamos. Esto es para tener reservas. Así básicamente funcionan las cosas para nosotros en casa y pienso que es así en muchos hogares. Por supuesto, un punto clave para que las cosas rindan, es usar solo lo necesario y siempre darle prioridad de consumo a productos que no se encuentren en escasez. Los alimentos más afectados son, principalmente, harina pan (el precio de este producto se mantiene estático porque está regulado), pollo, carne, margarina-mantequilla, azúcar, leche en polvo y aceite de maíz. Sin embargo, lo más deprimente es la escasez de papel sanitario. Una práctica muy común es que las personas se envían mutuamente mensajes de texto, cadenas de blackberry Messenger o de whatsapp, avisando dónde hay productos, y tenemos que correr para ver si llegamos antes de que se forme la fila. Otras personas están pendientes del camión de suministros o simplemente tienen algún informante interno en el supermercado, que avisa cuando viene algún producto. Otra opción son las bodegas en zonas más pobres de la ciudad, donde los productos se venden con un precio más alto, independientemente de que sean productos regulados. Por tratarse de este tipo de establecimientos, asumimos que no se les aplica sanción. La cosa funciona así, ellos los compran en supermercados a precios regulados y los revenden al doble o triple. Hay que destacar que el problema del desabastecimiento no es el único de los problemas en Venezuela”.
Nombre: Alejandro Mauricio Godoy Céspedes
Edad: 28 años
Ocupación: estudiante de Ingeniería Civil en la Universidad Central de Venezuela y trabaja en una compañía aseguradora
Lugar de residencia: Caracas
“Para ser sincero, el desabastecimiento en los últimos siete años es generalizado en el país, sin embargo, es luego del proceso electoral del 14A que se acrecenta esta dificultad para abastecer de alimentos en el pais. En particular, últimamente me ha resultado complicado encontrar mantequilla y pollo. Dependiendo del supermercado o local, también desaparecen otros productos, sin embargo, los antes mencionados no se consiguen en la mayoría. Los productos que actualmente se encuentran más escasos son el pollo, la carne tipo A y productos lacteos. El problema con respecto al aumento de los precios es que estos se encuentran "regulados" desde hace bastantes años, con variaciones interanuales por el gobierno central y aún así los negocios no toman en cuenta esto y aumentan precios de forma unilateral, así que me resulta difícil especificar un tiempo preciso; ya se ha vuelto rutina de mercado el tener que ir sorteando los mercados en busca de productos más "baratos", en vista del cambio de precios. Algunos locales ya se han visto en la necesidad de limitar la venta de ciertos rubros con el fin de aligerar el desabastecimiento. Todos los que me rodean concuerdan que la situacion de alimentos se encuentra complicada. Algunos factores que originaron esta crisis a lo largo de 14 años es la ineptitud en las politicas públicas, la incapacidad del gobierno de producir bienes y servicios, las asfixia por parte de este al sector privado de la economía. Al no ver motivación al cambio de parte del gobierno, dudo mucho que esta situación tenga alguna solución a corto o mediano plazo”.
Nombre: Emitza Arrechedera Torrealba
Edad: 43
Ocupación: técnica en informática, dedicada actualmente a las labores del hogar.
Lugar de residencia: Maracay
“He vivido el problema del desabastecimiento con asombro, por ser Venezuela un país rico y aprovisionado de todo recurso, para mí ha sido terrible e inconcebible. Esta situación la percibo desde hace algunos años, desde que el proyecto del gobierno (chavista) se ha empeñado en acabar con la empresa privada y la produccion nacional; pero todo se agravó desde el 2012. La escases es generalizada. Ya existían problemas con medicamentos, algunos alimentos, productos de aseo personal, etc., pero todo colapsó a mediados del año pasado a tal punto de no conseguir leche, azúcar, café, papel higiénico, servilletas, crema dental, jabón de tocador, shampoo, pollo, etc. Usted entra a un automercado y observa los anaqueles llenos, pero al observar bien colocan el mismo producto en casi todos los estantes. En lo que respecta a la cantidad de alimentos que se pueden comprar, en su mayoría puede llevar dos a lo más, tres unidades por persona. Los aumentos sobrepasan la inflación registrada, insólitamente unas de las más altas del mundo. Tengo familiares en Chile y me ha tocado traer productos de ese país; los chilenos vivieron algo similar y todo se resumía a una cola y desplazamientos grandes buscando productos. Esta situación no es ocasional, no se salva nadie en ningún estado. El modelo económico que impera en el país (chavista), el modelo económico tradicional se ha fracturado y/o estatizado. Todo lo que toque el gobierno es “del pueblo”, no le duele a nadie, no tiene cara responsable. Se trata de un panfleto ideológico. Indudablemente temo que se pueda agudizar, depende del monopolio estatal, sin producción nacional y, por tanto, de importación indiscriminada”.
Nombre: Aníbal Estaba
Edad: 28
Ocupación: ingeniero industrial
Lugar de residencia: Maturín, Estado Monagas.
“El problema de abastecimiento ha impactado a todos los estratos sociales y cada día es más difícil conseguir productos que son de primera necesidad y que pertenecen a la cesta básica de los hogares venezolanos. El problema de la escasez se ha percibido desde hace unos años atrás, siempre ha existido la deficiencia de abastecer todo el mercado así como la permanencia de los productos. La escasez ha estado constante, no siempre ha sido el mismo producto, pero es hoy en día en que se percibe con más fuerza por la falta de muchos productos de consumo diario. Dentro de los productos más afectados se encuentran los pollos, la harina pan, harina de trigo, papel higiénico, mantequilla, azúcar, café, jabones de baño, lavaplatos, entre otros. Los precios han subido considerablemente desde principios de año, cuando el gobierno anunció la devaluación del bolívar, conjuntamente con el alza del precio del dolar oficial que se encuentra con un control de cambio. El dolar paralelo hoy en día llega a los 28 bsf por cada dolar. He tenido que trasladarme a otros lugares para comprar, los productos normalmente se pueden conseguir en la capital del país, donde el gobierno trata de abastecer primeramente, y por la cercanía de las principales empresas que producen estos productos, aunque no es un secreto que Venezuela importa grandes toneladas de alimentos mensualmente. Los productos que están escaseados en los supermercados están restringidos la cantidad de productos al consumidor, la cantidad varia de cuatro a dos productos por personas, quienes deben hacer colas que parecen ser interminables para adquirir el producto. Mis familiares y amigos día a día se ven afectados, constantemente se avisan en qué supermercado han llegado los productos para ir corriendo a hacer la cola para poder comprarlos antes de que se acaben. Hay mucho temor de que se agudice la situación, a pesar del esfuerzo que hace el gobierno en solventarla, realizando acuerdos con otros países y aumentando la producción de las pocas industrias productoras, no parece mejorar, o así lo percibimos muchos venezolanos”.
Nombre: Leonor Jorquera
Edad: No revelada
Ocupación: profesora de Educación especial. Actualmente jubilada, ejerce particularmente para subsistir
Lugar de residencia: San Antonio, Estado de Miranda
Si bien Leonor relata que el desabastecimiento era un problema que se viene arrastrando desde el gobierno de Chávez, la situación hoy es más severa. La escasez no se limita a los alimentos, sino que también a otros productos como los de aseo personal y medicina. En este sentido, el comprar es una actividad que empieza a consumir gran parte del tiempo de los venezolanos y se está haciendo una práctica común.
Otro dato interesante que aporta es el hecho de que cada miembro de su grupo familiar compra los productos donde los encuentre, mientras desempeña sus labores, pues una vez en casa, es más difícil encontrar todo.
Ella agrega: “Efectivamente, tenemos restringidos en la compra algunos productos. La semana pasada solo nos vendían 2 paquetes de papel toillet por persona.(cada paquete tiene 4 rollos pequeños). Como consecuencia, sucede que la gente entra y sale del supermercado hasta tres veces para conseguir la cantidad deseada”.
Otro grave problema que se origina al respecto es el precio de estos escasos productos. Pues, según comenta Leonor: “Muchas veces el no conseguir un producto ocasiona el abuso y la especulación pues los comerciantes de la economía no formal, conocidos como "buhoneros" los tienen y elevan los precios hasta el cuádruple de su valor. Y hay gente que los compra”.
”Creo que aún no hemos tocado fondo, este es un gobierno poco efectivo, ocupado de tapar sus propios intereses personales y haciendo creer a la gente que están haciendo lo que ellos llaman un gobierno de calle para resolverle los problemas a la población”.
Productos más afectados: “Papel toillet, harina de maiz, harina de trigo, cera de pisos, aceite vegetal, carnes y pollo, huevos(han subido en 100% su valor en tan solo tres meses) medicamentos muchos”.
Nombre: María Maduro
Edad: 57 años
Ocupación: médico veterinario
Lugar de residencia: Estado Mérida
María Maduro Concuerda con los comentarios de los otros entrevistados. El problema del desabastecimiento se fue dando desde hace un tiempo gradualmente hasta su crisis actual. Primero comenzó a disminuir la variedad de los productos hasta ahora que resulta “casi imposible conseguir muchos de ellos”.
Además otro punto en que concuerda es en la focalización de esta escasez, la cual se incrementa en los estados alejados de la capital, como en el de Mérida, donde reside actualmente.
“Desde siempre he realizado mis compras en un supermercado muy cercano a mi casa, poco a poco pude ver como empezaban a escasear productos básicos y de primera necesidad en la vida del venezolano común, llevándome esto a recorrer varios supermercados de toda la ciudad donde por redes sociales se difundía que habían llegado algunos productos que ya estaban inexistentes”.
“Al trabajar con público es muy fácil escuchar las quejas diarias de todos los ciudadanos de lo difícil que es conseguir muchos productos en la actualidad. También en ocasiones es posible conseguirlos con revendedores informales pero por el doble y hasta el triple de su precio original”.
Nombre: Emilia Coronado
Edad: 53 años
Ocupación: oficinista
Lugar de residencia: Punto Fijo, Estado Falcón
“Hemos vivido momentos y situaciones muy terribles, pero ésta, la del desabastecimiento ha sido la peor. Primero comenzaron con la restricción de los productos, ejemplo: si comprabas harina pan te vendían sólo una o dos por personas. Supongo que era para que nos fuésemos acostumbrando. Luego comenzamos a notar que ni siquiera eso podíamos hacer porque sencillamente no estaban en los anaqueles de los supermercados y si informaban (por radio pasillo) que los buhoneros tenían, salíamos volando a buscar el producto y nos encontrábamos que teníamos que pagar el doble o el triple de lo que costaba en realidad. Y no teníamos otra alternativa que comprarlo al precio que fuese con tal de obtener el producto que necesitábamos”
Las complicaciones para Emilia son tales, que según relata, debe dedicar un día entero para las compras. Por su trabajo, le es imposible hacerlo durante la semana, por lo que ocupa el sábado. Pero con esto, las dificultades no disminuyen, pues no le basta un solo lugar para comprar, sino que requiere ir cada vez más lejos de la ciudad para conseguir algo, y hasta comenta “Una tiene que volverse amiga de las cajeras para que le guarden algo de los productos que escasean cuando éstos lleguen al mercado.”.
Respecto a los precios, Emilia Coronado aporta otro detalle interesante, más allá del aumento lógico cuando estos escasean. Se trata del componente emocional en situaciones de crisis como estas. Ella relata que “esto impacta en el presupuesto familiar porque cuando llega algún producto y uno tiene la oportunidad de comprar más de lo que se necesita en ese momento, por el temor de no conseguirlo de nuevo, debe disponer de lo que no estaba presupuestado”.
“El desabastecimiento es para todos. Aquí las peleas de las amas de casa es a "cuchillo limpio" cuando llega el pollo, que es el alimento mas apreciado por los ciudadanos”.
“Ni siquiera nos podemos fabricar nuestro propio papel "toilet".Aunque usted no lo crea, ya se está importando y dicen, no me consta, que el de China viene con bacterias. Ahora será un problema aún mayor porque si nos enfermamos, ahora si que viene lo bueno pues no se consiguen las medicinas".
Nombre: Saúl Rondón Jorquera
Edad: 26 años
Ocupación: médico Veterinario
Lugar de residencia: Estado de Miranda
Saúl confirma que existe restricción en la compra de productos. Generalmente, comenta, el máximo de lo que te puedes llevar es dos unidades. Además, en su trabajo como veterinario también ha constatado que el problema se extiende a este tipo de alimentos, especialmente respecto al precio de los mismos.
“El desabastecimiento parece ser por temporadas hay veces que falta aceite, margarina, harina pan y harina de trigo, ahorita lo que esta faltando es el papel higiénico, el pan, la harina de maíz y próximamente la harina de trigo me han dicho porque la empresa que la producía se retiro del país”.
A juicio de Saúl, las razones de esta crisis está en “todos los productos que tengan que ver con importaciones, el problema es el control cambiario y la falta de divisas. Los precios regulados son un problema si hay una inflación tan grande como la que hay acá y la falta de producción nacional”
Finalmente, el veterinario termina por confirmar su temor respecto al futuro y agrega: “no sé qué más se puede agudizar. ¡Esto es lo más agudo que he visto en mi vida!”
Nombre: Igor Hernández
Ocupación: licenciado en Cienicas Industriales
Lugar de residencia: Valencia Carabobo.
Que hay de cierto respecto del tema del desabastecimiento?
Es cierto, y un tema principal es el control de divisas que existe sobre la mayoría de las empresas privadas, que son el motor principal de la economía. Por otro lado sin dólares no pueden comprar sus productos en los mercados internacionales. Ese es un punto central, lo cual provoca que no hayan productos básicos, como papel higiénico, cosméticos, medicinas, alimentos básicos, como harina de maíz.
En muchos casos es por la falta de divisas, y en otros es por el control del gobierno dice Hernández, quien afirma que por algunas razones, el gobierno controla los medios para hacer llegar los alimentos a los ciudadanos. Esto, ya que el gobierno en algunas ocasiones deriva los alimentos para abastacer el Mercal, que es la red gubernamental de abastecimiento.
De hecho, hace pocos días Empresas Polar y el gobierno llegaron a un acuerdo para permitir la producción y distribución de alimentos. (Polar produce casi el 51% de la harina de maiz a nivel nacional), el resto de las empresas son propiedad del gobierno, y no están funcionando a plena capacidad.
El desabastecimiento...?
Según el Hernández, quien es Licienciado en Cienicas Industriales, es cierto que hay escasez de algunos productos. Por ejemplo el papel higiénico, hasta hace un par de semanas había variedad de marcas, ayer (martes) fuí a tres supermercados y solo había una marca y en pocas cantidades.
Otra de las cosas que escasean es el pollo. De pronto sacan stock del mercado y la gente debe hacer filas para comprar ese tipo de alimentos. Entonces, uno dice, somos un país petrolero y tenemos que vivir este tipo de cosas.
Qué otros elementos faltan...
Harina de trigo, leche en polvo. La leche que hay es toda importada, lo cual indica que la empresas que antes producian ya no lo hacen.
Existen topes para efectuar compras...
En algunos casos puede ser. Depende del supermercado, pero son casos puntuales.
Redes sociales...
Así es, a través de las redes sociales como el twitter, la gente se está informando sobre dónde hay productos para comprar.
Nombre: Edwin Gómez
Ocupación: abogado
Lugar de residencia: Valencia, Estado de Carabobo.
Para el abogado y activista del movimiento Voluntad Popular, la situación es caótica es un desastre total. Es más, los buboneros (comerciantes ambulantes) tienen más mercancías que el propio gobierno. Entonces cuando se revisa cómo reciben los productos, se aprecia que hay una mafia desde el propio gobierno afirma enfático, ya que a los negocios no les interesa el tema del abastecimiento, sino el ganar dinero, y solo, luego de esto los alimentos aparecen.
En la calle, la gente está sufriendo como nunca lo hizo en los últimos 20 años, ya que deben recorrer casi todos los municipios de Valencia para encontrar lo que necesitan, enfatizó con rabia.
De quien es la culpa...
Respecto de las responsabilidad, Gómez en categórico, la culpa sin lugar a dudas es del gobierno. No han implementado políticas de Estado, ya que no las tienen. No han podido implementar un plan para palear el problema de las divisas que necesitan la empresas para recibir y comprar sus materias primas.
Por tanto, como no están las divisas necesarias para la compra de insumos, el gobierno se ha visto obligado a importar comida desde los países de la región. Un ejemplo es el caso del pollo, que se trae de Brasil, el café que se importa desde los países centroamericanos (Nicaragua y Colombia), el café ya casi no es venezolano.
Esta situación se dio en los gobiernos de Chávez...
No es que la situación fuera mejor, pero cuando se llegaba a puntos muy críticos, Chávez emitía una orden a las empresas para que suplieran los requerimientos de la ciudadanía.
Maduro está tratando de volver a implementar el Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad), en donde no se conoce el precio de entrada ni da salida del dólar. Entonces, con este sistema se han producido las devaluaciones por todos conocidas en el país. Todo esto apunta a que el precio de la comida seguirá subiendo, el precio del dólar también subirá, lo que redundará en que las empresas para poder producir y comprar materia prima, van a tener más problemas y terminarán cerrando.
Entonces, el principal problema que se vive en el país es la falta de dólares, y el mal trabajo que están realizando las oficinas fiscalizadoras de empleo, donde no se están resolviendo de buena manera los problemas laborales. Esto quiere decir que aquellos empleados que deberían ser despedidos de sus trabajos, por estar cometiendo faltas, la autoridad está fiscalizando a las empresas, pese a que existan empleados "saboteadores".
Cuales son los principales materias que faltan...
La mitad de la cesta básica: azucar, aceites, café, leche, harina de trigo, algunas hortalizas, carnes, pollo, atún, mayonesa etc.
Cuando el ministro Osorio (Ministro de Alimentos) dice que la escasez es falsa...
Ese ministro es uno de los principales beneficiarios de las cadenas de comida que tiene el gobierno. De eso hay pruebas que no las tengo yo, pero que si han sido presentadas.
Nombre: Ruby Bastista
Ocupación: publicista
Lugar de residencia: Carabobo
Si, hay desabastecimiento en todos los rubros o áreas del comercio. Falta papel sanitario, harina, aceite. En todos los aspectos hay desabastecimiento de mercancías. Lo poco que hay, son frutas y verduras, pero a precios muy elevados. Seis manzanas cuestam 100 bolivares (US$16) por ejemplo.
En mi caso, una semana compro lechosa (papaya) y la otra bananos (plátanos), y mucho mango ya son las frutas más baratas.
Hay topes para acceder a algunos productos...
Sí. Eso sucede con la harina pre cocida, de ese tipo de productos te dejan llevar nada más que 4 paquetes por persona, y en ocasiones solo dos.
De quién es la responsabilidad de esta situación...
Todo es culpa del gobierno, ya que está tratando de crear crisis en las empresas para poder tomar el control del poder, ya que lo que nosotros estamos viviendo es una dictadura, que está disfrazada de democracia. Entonces el gobierno necesita crear escasez. De hecho, se han visto contenedores con alimentos que se han podrido, ya que el gobierno no quiere sacarlos al mercado, para luego culpar a los empresarios.
Otro motivo sería la falta de dólares...
Sí. Aunque hay cosas que se producen en el país, hay tantas limitaciones que los empresarios no pueden producir por las faltas de divisas. Con Chávez también sucedía, pero ahora se agravó, ya que los que están encargados no conocen ni papa de esta vaina, dice Ruby.
Cómo ves el futuro...
El desabastecimiento va a continuar y se va a agravar. Para poder conseguir algo, hay que recorrer 6 o 7 supermercados, y luego hacer filas para conseguir los productos. La cadena distributiva se vé afectada.
Los buboneros son otro problema, ya que de hecho ellos tienen más productos que los propios establecimientos.
Futuro social y político...
Lo veo crítico y vamos hacia una situación peor.