Brasil pobreza
Unos 7,2 millones de brasileños pasaron hambre el año pasado pese a avances
Infolatam/Efe
Río de Janeiro, 18 de diciembre de 2014
Río de Janeiro, 18 de diciembre de 2014
Las claves
- Mientras que en 2009 había 17,9 millones de residencias en que sus habitantes enfrentaron alguna forma de restricción alimenticia, ese número cayó a 14,7 millones en 2013.
- Según el IBGE, el 77,4 % de las 65,3 millones de residencias brasileñas estaba en situación de seguridad alimenticia el año pasado. Es decir que 149,4 millones de brasileños (72,2 % de la población) consiguieron alimentarse adecuadamente en 2013.
El número de brasileños que sufre alguna situación grave de privación de alimentos cayó un 35,7 % en los últimos cuatro años, desde los 11,2 millones en 2009 hasta los 7,2 millones en 2013, de acuerdo con el informe publicado por el gubernamental Instituto Brasileño de Geografía y Estadísticas (IBGE).
De la misma forma, el número de brasileños en situación de inseguridad alimentaria, es decir que enfrenta alguna restricción alimenticia o al menos una preocupación con la posibilidad de no tener recursos para alimentarse, cayó desde los 66,2 millones en 2009 hasta los 52 millones en 2013.
El informe sobre Seguridad Alimentaria, que el Instituto elaboró con base en una amplia encuesta por muestras de domicilios realizada en 2013, mostró que el porcentaje de residencias en situación de inseguridad alimenticia en Brasil se redujo desde el 34,8 % en 2004, pasando por el 30,2 % en 2009, hasta el 22,6 % en 2013.
Mientras que en 2009 había 17,9 millones de residencias en que sus habitantes enfrentaron alguna forma de restricción alimenticia, ese número cayó a 14,7 millones en 2013.
En cuanto a la situación de inseguridad alimenticia grave, es decir de familias pasando hambre o con serias restricciones para alimentarse, el porcentaje de residencias en esa condición bajó desde el 5,0 % en 2009 hasta el 3,2 % en 2013, su menor nivel histórico.
Esa reducción fue posible gracias a las políticas de distribución de subsidios a los más pobres puestas en marcha por los Gobiernos de Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2010) y de su sucesora y actual presidenta, Dilma Rousseff (2011-2014), que garantizaron números récords y ejemplo en el mundo de disminución de la pobreza.
Según el IBGE, el 77,4 % de las 65,3 millones de residencias brasileñas estaba en situación de seguridad alimenticia el año pasado. Es decir que 149,4 millones de brasileños (72,2 % de la población) consiguieron alimentarse adecuadamente en 2013.
En comparación con 2009, el número de brasileños en seguridad alimenticia aumentó en 21,7 millones y el número de residencias en 9,1 millones.
El estudio mostró también que el mayor porcentaje de residencias en situación de inseguridad alimenticia estaba en las áreas rurales (35,3 %), mientras que en las urbanas ese porcentaje era del 20,5 %.
De la misma forma, la inseguridad alimenticia afectó más a la región nordeste del país, la más pobre y en donde el 38,1 % de las residencias estaba en esa situación, y a la norte (36,1 %).
Las cifras doblan las de regiones más desarrolladas, como la sudeste (14,5 %), sur (14,9 %) y centro-oeste (18,2 %).
De igual forma, el estudio indicó que la mayoría de las familias con dificultades para acceder a alimentos los compra fiados.
De los domicilios en inseguridad alimenticia, un 43 % pagó después de consumir el alimento para no pasar hambre, un 27,8 % solicitó alimentos prestados a sus familiares, vecinos o amigos, un 7,2 % dejó de comprar productos superfluos y un 5 % pidió dinero prestado.
El 3,5 % de los responsables por los domicilios en inseguridad alimenticia excluyó las carnes de su dieta para que no faltase el resto de alimentos, resaltó el informe.
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