O que é este blog?

Este blog trata basicamente de ideias, se possível inteligentes, para pessoas inteligentes. Ele também se ocupa de ideias aplicadas à política, em especial à política econômica. Ele constitui uma tentativa de manter um pensamento crítico e independente sobre livros, sobre questões culturais em geral, focando numa discussão bem informada sobre temas de relações internacionais e de política externa do Brasil. Para meus livros e ensaios ver o website: www.pralmeida.org. Para a maior parte de meus textos, ver minha página na plataforma Academia.edu, link: https://itamaraty.academia.edu/PauloRobertodeAlmeida;

Meu Twitter: https://twitter.com/PauloAlmeida53

Facebook: https://www.facebook.com/paulobooks

quinta-feira, 16 de agosto de 2012

Argentina: recuo da democracia e do Estado de direito


 Aliás, desde muito tempo, desde 1945, pelo menos, ou provavelmente desde antes...
Paulo Roberto de Almeida 
ARGENTINA: Vanguardia en el ataque a las libertades
Letras Internacionales (Publicación del Departamento de Estudios Internacionales, Facultad de Administración y Ciencias Sociales), agosto 2012

En las últimas semanas las encuestas de opinión ratifican que la imagen pública de Cristina Kirchner comienza a aproximarse a la “caída libre”.  La imagen “positiva” (como expresa la jerga de las encuestas de opinión) está más de 40 puntos por debajo de la que poseía en el momento en que asumió la segunda Presidencia y, la llamada imagen ”negativa”,  es tres veces más alta que la que tenía en ese mismo momento puesto que ya supera largamente el 30% de la opinión nacional. Que la tendencia sea inevitable, ya veremos que, desgraciadamente, no sirve como anuncio de su salida del poder porque de aquí a las elecciones queda aún un buen trecho y, en el tipo de régimen que esta presidente habita, las reglas de obtención del poder son por demás peculiares. Sí, en cambio, este desfondamiento de su imagen pública puede servir de indicador, quizás algo temprano pero moderadamente esperanzador, de que la demencia continuista de la primera magistrada, va a enfrentar grandes problemas si es que sigue empeñada en la reelección.
No se necesita de análisis sesudo alguno para explicar la baja de la imagen presidencial. Alcanza con repensar como se construyó oportunamente su popularidad, fundamentalmente de la mano de su difunto esposo, para imaginar, ahora, como se está “deconstruyendo” la misma. 
En la lógica del neo-populismo autoritario (del que el kircherismo es un ejemplo palmario) que se ha instaurado en amplios sectores y países de América Latina, de lo que se trata  es de reducir la política a dos operaciones elementales.
Primero se trata de, mediante dádivas, “desparramar recursos” (que no es la manera de distribuir), supuestamente destinados a “los pobres”. Estos recursos, en buena medida, quedan en manos de las instancias intermedias de los movimientos peronistas, chavistas, correístas, las de cualquier otro caciquillo de turno, o en las alforjas de los aparatos corporativos de los sindicatos que, esos mismos movimientos, han tornado en cuasi omnipotentes –(el caso de Frente Amplio en el Uruguay es paradigmático: un sindicato, ADEOM, se ha apropiado de buena parte de la Intendencia de Montevideo y una suerte de “sindicatos” que se pretenden “docentes” ya se han digerido la totalidad del enorme incremento presupuestal que ingenuos Ministerios de Economía le ha otorgado a ese servicio público desde hace 2 gobiernos)-.
Segundo, al mismo tiempo que se procede a este “desparramo”, el aparato estatal central, se dedica a destrozar toda forma de oposición, disidencia o ”matiz” que manifieste la menor diferencia con el discurso, el humor o el capricho cotidiano del Gorila (o la Gorila) que esté al mando (Cristina, Chávez, Lula, Correa, Morales, etc.). Medios de prensa, sindicatos autónomos, jerarquías locales, jueces y poder judicial, partidos de oposición, grupos de interés, sindicatos no obsecuentes, etc., es decir toda la sociedad civil que todavía no ha sido cooptada o comprada, deberán  ser descalificados radicalmente y serán, sin la menor duda, más o menos paulatinamente arrasados en plazos variables hasta quedar reducidos a su más mínima expresión).
En resumen, la ecuación del neo-populismo es sencilla: realizar mucho gasto ostensible, con tonalidad “progresista”, yaplicar una disciplina de hierro en la erradicación, lo más radical posible, de toda forma de pluralismo, sea político, social, ideológico, etc.
No sin cierta ingenuidad, en Argentina, hay algunos analistas que pretenden adjudicar el desastre de las cifras de popularidad de la imagen de Cristina al  uso y abuso coyuntural de las cadenas de Radio y Televisión permanentes y sistemáticas (a propósito de ello informábamos hace algunas semanas en “Letras Internacionales” No. 158 y enhttp://jbonillasaus.blogspot.com/2012/07/argentina-hacia-una-reeleccion_19.html).
Como dijésemos en esa ocasión, el uso oficial de los medios en cadena es tan bochornoso que hasta el electorado peronista argentino comienza a desconfiar.  En ese sentido sería de una ceguera dramática no advertir que Cristina Kirchner ha entrado en una lógica de ”fin de règne”que es casi de Manual de Ciencia Política. Cada día de la semana (e incluso, a veces, durante el fin de semana) encuentra un nuevo enemigo a quien atacar y, por lo general, últimamente lo hace entre los que integran sus propias filas. No debe eso sorprender a nadie: eso anuncia el fin de Cristina pero no presagia, en absoluto, el fin del neo-populismo autoritario en Argentina. Es más, es necesario recordar que el mecanismo de la “quema” recurrente de déspotas y tiranuelos a lo Kirchner, Correa, Morales, Lula, etc. (con una modalidad relativamente peculiar en el caso del priísmo mexicano) es, en verdad  “el modo de reproducción” mismo del autoritarismo populista.
Si alguien, entre los más jóvenes, todavía duda de ello (los que tenemos algunos años vivimos las secuelas de los Perón, los Vargas, los Cárdenas, etc. ya lo sabíamos) ahora estamos abiertamente advertidos por el tan sesudo como senil teórico del kirchnerismo, el inefable Ernesto Laclau, autor del libro  “La Razón Populista”.
Tiempo ha intelectual respetado, hoy se ha transformado en escriba de un régimen manejado por una patota prepotente que atropella ilegalmente cuanto obstáculo, real o ficticio, se atraviesa en su camino. Imponerle al agro argentino detracciones por decreto sin pasar por el Parlamento, cerrar las fronteras con países vecinos, incumplir las obligaciones financieras del país, atacar sistemáticamente a la prensa escrita y a los medios opositores, violar los tratados internacionales avasallando los derechos del país vecino (Uruguay), utilizar los muertos de la dictadura para montar un esquema de corrupción o proteger un vice-Presidente coludido con la empresa que imprime la moneda del país, no son mas que unos pocos ejemplos de la mezcla antidemocrática de ilegalidad y corrupción que es el “cristinismo”.
Laclau es, en su tontera política, perfectamente explícito: el populismo ”necesita“ de la creación permanente de “enemigos“ como forma de “…construir al pueblo”. Lo que este autor llamar “la construcción del pueblo” es, en realidad, una versión patética de la necesidad compulsiva de “dividir” a la sociedad, en la tradición peronista de “alpargatas SI, libros NO.
Se trata de crear, mediante el uso ilegítimo de la fuerza del Estado, dos campos políticos y sociales que se definan como opuestos. Esa fue la esencia misma del peronismo y el quiebre decisivo en la historia de un gran país que, destinado a transformarse en un modelo de éxito económico, se ha tornado, de 1945 a la fecha, en un ejemplo de fracaso histórico. En su versión actual, en el ejemplo kirchnerista, (es decir, aventadas todas las pretensiones de que el populismo “integraba” nuevos sectores sociales como repitieron hasta el cansancio “progresistas” bien intencionados) se utiliza el mismo recurso  de la voluntaria escisión de la sociedad, aunque éste aparezca ahora como una modalidad “tinellizada”, kitsch y corrupta, de “la dialéctica amigo-enemigo” de Carl Schmitt
En las últimas semanas, la incorporación del tema de “la corrupción” en la definición de cómo el gobierno argentino “divide” la sociedad del país es algo que está tomando cada vez más fuerza en los discursos de la presidente.
Durante todos los gobiernos kirchneristas, la Argentina y el mundo asistieron (con singular irresponsabilidad ambos, conviene decirlo) al desarrollo siempre más y más creciente de la corrupción del gobierno y de los presidentes de ese país. Pero aún así, para entonces, el ser considerado súbdito leal del gobierno o enemigo del mismo se dirimía en un terreno donde la cuestión de la corrupción no era forzosamente convocada. Es cierto, la mayoría de los súbditos leales pertenecían y pertenecen a algún esquema de corrupción más o menos conocido. Pero, por cierto tiempo, para ser relativamente confiable en el mundo del populismo autoritario de Kirchner, no era absolutamente necesario estar “comprometido” en algún esquema corrupto. El que no lo estaba podía igualmente ser un compañero de ruta transitorio. Pero desde que la presidente asumió sola la gestión del país, no estar “comprometido” es un peligro para el “establishment”. Ahora el gobierno expresa en su práctica la desconfianza del régimen, el temor de los prepotentes, el miedo de los corruptos, el temblequeo de los genuflexos en un permanente y maníaco ataque contra toda persona que no comulgue con los más nimios caprichos de la “mandataria”.
Y, curiosamente ahora, en este lamentable escenario de corrupción gubernamental generalizada que la presidencia llama al linchamiento simbólico de los medios y de los periodistas pidiendo que “se denuncie la corrupción”, en particular en esas “cadenas nacionales” donde ella se regodea con el aplauso de sus acarreados.
Nadie puede dudar que en Argentina, como en todas partes, existan medios y periodistas corruptos pero, en realidad, parece un chiste que Cristina Kirchner sea la “denunciante”.  Si lográsemos juntar los jueces argentinos honestos (que seguramente todavía los hay) y los legisladores igualmente honestos (que muy poquitos quedan) y pudiésemos protegerlos de la represión oficial, sólo una escuálida minoría del staff del kirchnerismo quedaría fuera de la cárcel. Los demás irían todos presos por las más diversas figuras penales que el lector se pueda imaginar.

Una sola y muy sencilla decisión tiraría abajo toda la argumentación del Ejecutivo argentino sobre la corrupción en los medios. La corrupción en los medios viene esencialmente del gobierno, es creada y fomentada por el gobierno. Vean la televisión de ese país (o la de Brasil, Venezuela, Ecuador, Uruguay, en realidad, da lo mismo, porque todos son igualmente irresponsables) y que la conocida organización “Transparencia Internacional”, con sede en Berlín, Alemania, (pero que tiene “capítulos nacionales”, incluida la Argentina y dirigida por la canadiense Huguette Labelle), audite los criterios con los que el gobierno distribuye la publicidad oficial entre “medios afines al gobierno” y “medio críticos del gobierno”. Es decir, investigue cómo la Sra. Kirchner usa los recursos de la ciudadanía para financiar la imagen de su patético gobierno y su permanente campaña electoral.

Esa posibilidad, desde luego no le quita el sueño a la presidente. Nada de ello va a pasar. Es más, dos días atrás, tuvo el descaro de declarar, ella, la presidente que resulta ser, inexplicablemente, la segunda presidente multimillonaria de Sudamérica (el primero es Piñera pero este sí hizo su fortuna fuera de la política): "El cuarto poder debería publicar qué empresas les pagan para que cuando leamos un artículo sepamos", siguió la Presidenta. Y hasta se animó a reclamar: "Necesitamos una ley de ética pública porque la información hoy tal vez sea lo más importante porque la leen millones de personas y a partir de eso toman decisiones".
Esta idea no es nada original y hace tiempo que el régimen argentino insiste en ella. Pero viene a cumplir, en la coyuntura, una función en algún sentido “vanguardista”. Mientras los regímenes totalitarios como el de Cuba han terminado radicalmente con todo tipo de libertad de prensa, en América Latina, los neo-populismos autoritarios estaban lidiando con distintas políticas para desembarazarse de la prensa de oposición sin acertar a encontrar una solución satisfactoria. Correa persigue judicialmente a los propietarios de medios y a los periodistas, Chávez envía sus secuaces a expropiar redacciones e imprentas en un estilo más decimonónico y el régimen nicaraguense tiene métodos todavía mas expeditivos.
Pero todos esos procedimientos aparecen como desprolijos.La idea de la presidente Kirchner tiene una enorme ventaja: hacer votar una ley que suprima la libertad de prensa para todo los medios que no sean oficialistas. La idea tiene la descomunal ventaja de que habrá millones de tontos que creerán que la ley es legítima. Por lo pronto, al gobierno uruguayo, que tan bien se lleva con el argentino, le ha gustado la idea y está instrumentando un proyecto de Ley de Mediosque ya intenta atropellar a la libertad en nuestro país.

Quantos meses (ou anos) de "asilo" em embaixada...

O Equador, talvez "mal acostumado" com a prática de asilo diplomático em países tão instáveis e conturbados quanto os latino-americanos, acredita que o Reino Unido tem a obrigação de dar um salvo conduto a um extraditando, qualquer que seja este.
Vamos ver quantos meses, talvez anos, o extraditando vai passar na londrinense embaixada. Pelo menos comer bem, se supõe que ele passe a comer...
Paulo Roberto de Almeida 

Foreign Secretary statement on Ecuadorian Government’s decision to offer political asylum to Julian Assange
16 August 2012 

(...)
“Under our law, with Mr Assange having exhausted all options of appeal, the British authorities are under a binding obligation to extradite him to Sweden. We must carry out that obligation and of course we fully intend to do so. The Ecuadorian Government's decision this afternoon does not change that in any way. Nor does it change the current circumstances in any way. We remain committed to a diplomatic solution that allows us to carry out our obligations as a nation under the Extradition Act.
(...)
"...We will not allow Mr Assange safe passage out of the UK, nor is there any legal basis for us to do so. The UK does not accept the principle of diplomatic asylum. It is far from a universally accepted concept: the United Kingdom is not a party to any legal instruments which require us to recognise the grant of diplomatic asylum by a foreign embassy in this country. Moreover, it is well established that, even for those countries which do recognise diplomatic asylum, it should not be used for the purposes of escaping the regular processes of the courts. And in this case that is clearly what is happening."
(...)
http://www.fco.gov.uk/en/news/latest-news/?view=News&id=800710782 

O Brasil na II Guerra Mundial - UnB, 30-31/08/2012


Ciclo de Debates “70 anos da participação do Brasil na Segunda Guerra Mundial” – UnB

 
 
 
 
 
 
Rate This

O Departamento de História da Universidade de Brasília convida para o Ciclo de Debates “70 anos da participação do Brasil na Segunda Guerra Mundial”, que será realizado nos dias 30 e 31 de agosto, conforme programação abaixo:
 30 de agosto
14h: Intimidades e Intimidações: a 3ª Reunião de Consultas dos Ministros das Relações Exteriores das Repúblicas Americanas na cidade do Rio de Janeiro
  •  Antonio Pedro Tota (PUC-SP)
  • Francisco Doratioto (UnB)
  • Carlos Eduardo Vidigal (UnB)
 18h: Aliança: a adesão do Brasil à ONU e à Carta do Atlântico
  •  Antonio Carlos Lessa (UnB)
  • Virgílio Caixeta Arraes (UnB)
 31 de agosto
14h: O Exército, a Marinha e a Aeronáutica na Segunda Guerra Mundial
  •  Coronel-Aviador Manuel Cambeses Jr.(FAB; IGHMB)
  • Capitão de Corveta (T) Carlos André Lopes da Silva (MB; IGHMB)
  • Coronel Carlos Alberto Naccer (EB; IGHMB)
18h: Memórias da FEB
  •  Cesar Campiani Maximiano (ECEME)
A entrada é franca e o evento terá lugar no Auditório IH – ICC, Ala Norte, Campus Darcy Ribeiro, Universidade de Brasília, Asa Norte, Brasília – DF. Informações adicionais podem ser obtidas pelo e-mail tremontethiago@unb.br.

quarta-feira, 15 de agosto de 2012

Grecia saindo do euro: cronica de um desastre anunciado - Der Spiegel


Greece Before the AbyssOnly Bankruptcy Can Help Now

Lighting strikes above the Arcopolis in Athens.Zoom
dapd
Lighting strikes above the Arcopolis in Athens.
Greece has disappointed its creditors yet again. Now its government plans to ask for more time -- and needs billions more in aid. But Greece's euro-zone partners are unwilling to provide any more help, meaning that the only hope now is to admit defeat and let the country make a fresh start.
Info
Officially, at least, everything is going according to plan. In September, officials with the troika -- made up of the European Commission, the European Central Bank (ECB) and the International Monetary Fund (IMF) -- are planning to travel to Athens to check on the progress that Greece has made with its cost-cutting program. Then, according to the plan, they could disburse billions more in aid out of the second bailout package for Greece, which the euro-zone countries and the IMF agreed on in February.

But, in reality, it is rather unlikely that all of the €130 billion ($160 billion) in the bailout package will ever be paid out. And what is even more unlikely is that the money would keep Greece from going bankrupt.
The assumptions on which the current program was based in February are no longer valid. At that time, it was thought that the Greek economy would only contract by 4.5 percent this year, but now it appears that this figure will be closer to 7 percent. This would mean even fewer tax receipts and even more social expenditures. What's more, given these circumstances, it's almost irrelevant that the Greek government is expected to ask for a two-year extension, to 2016, of the agreed austerity plan.
One thing is clear: In addition to more time, Greece also needs more money. And those who have been financing it thus far -- primarily the major euro-zone countries and the IMF -- are either unwilling or unable to give the country any more. In political terms, that is completely understandable: One can only imagine the earful that German Chancellor Angela Merkel would get if she were to present a third aid package for Greece before the Bundestag, Germany's parliament. In fact, the members of her own conservative coalition would probably chase her out of the building.
Truth be told, Merkel only has herself to blame for the fact that she is stuck in this pickle. She dug in her heels too much in insisting that the problems of Southern European countries could only be solved by drastic belt-tightening, and that what the Greeks were really lacking was the will to do what was necessary. Now she can hardly abandon this way of interpreting the crisis.
Delaying the Inevitable and Necessary
If it was ever the goal of Merkel and her allies to rescue Greece from bankruptcy, then they have failed. The only thing the drastic austerity measures have done is to exacerbate the economic crisis and push Greece's debts even higher. Nevertheless, the creditors have insisted on moving forward with their plan -- even though it already became clear long ago where it was heading.
The end of this approach now appears to have been reached. Neither euro-zone countries nor the IMF can provide Greece with more aid without sacrificing their own credibility. Given these circumstances, there is only one option left: Greece must go broke.
European politicians have balked from taking this step -- probably also because the new permanent bailout fund, the European Stability Mechanism (ESM), which is supposed to cushion the economic impacts of a Greek bankruptcy, has yet to enter into force.

Instead, they have tried to buy time with the help of a dangerous interim arrangement: The Greek government is supposed to borrow the money it needs from the ailing Greek banks. In return, the banks receive sovereign bonds that they can, in turn, provide as securities for new loans from Greece's central bank. In this way, Greece's central bank is financing the Greek state in what is really just a kind of shell game that gets riskier the longer it is played. In any case, all euro-zone countries will in the end be jointly on the hook for these liabilities.
A Greek bankruptcy would already be costly enough at the moment. Estimates say that it would cost Germany alone some €80 billion. Lest this figure climb any higher, the right thing to do would be to finally make that one fateful step.
No matter how unpredictable the consequences of a Greek bankruptcy might be, it appears to offer the only chance to resolve the messy situation. In this way, Greece would be free of its debts and would have a chance to make a fresh start -- either as part of the euro zone or not. And the creditors in Berlin and Brussels could finally free themselves from the spiral of threats and rescue actions that they have gotten themselves into.

A privatizacao envergonhada dos companheiros, e a mistificacao politica e economica...

Os companheiros pretendem que eles estabilizaram a economia brasileira, quando na verdade sempre lutaram, até de maneira ignominiosa, contra os planos de estabilização conduzidos anteriormente a 2003. 
Eles agora pretendem, de maneira fraudulenta, que não estão fazendo privatização, e sim concessões. Haverá concessão para os usuários também, ou vamos ter de pagar por serviços cobertos por impostos e não oferecidos pelo Estado? Faz alguma diferença?
Nunca antes se mentiu tanto no Brasil...
Abaixo, um post sensato, mas que toca nos pontos chave. Permit0-me sublinhar que a forma escolhida, a menor tarifa de pedágio, vai redundar em serviços porcos e estradas mal cuidadas.
Paulo Roberto de Almeida 

A volta da privatização

Não há meias palavras. O que o governo fez hoje com pelo menos cinco anos de atraso foi reconhecer que o setor público, no Brasil, perdeu a capacidade de investir tanto em volume quanto na velocidade exigida para acompanhar o crescimento da economia.
A grande promessa para desatar o nó do investimento público no Brasil, em 2007, foi o lançamento do Programa de Aceleração do Crescimento (PAC), um programa que é cada vez mais motivo de piada dentro do próprio setor público. Teoricamente, o PAC faria avaliações periódicas das principais obras do governo e, assim, os problemas seriam resolvidos de forma mais rápida. Isso aconteceu? Infelizmente não. Por favor, vamos aos números.
foto: Sérgio Lima/Folha Imagem
Primeiro, para fundamentar a minha tese, vamos olhar para a execução do programa 1036, a transposição do Rio São Francisco, aquele programa que levou um padre a fazer greve de fome e a bonita Letícia Sabatella derramar lágrimas.  Essa obra teve inicio, em 2007, como a mais cara a ser paga com dinheiro dos tributos entre os projetos do PAC. O custo total da obra foi estimado em 4,8 bilhões de reais para ser concluída, em 2010.
O que aconteceu? Ocorreram vários atrasos na obra que agora só deverá ficar pronta, em 2014, um atraso “pequeno” de 48 meses, apesar de ser a obra mais importante do PAC financiada com recursos do orçamento da União. E o custo? Bom, atrasos sempre afetam o custo da obra que, no ano passado, foi reestimado para R$ 8,2 bilhões; um crescimento “modesto” de 71%.
O Ministério do Planejamento falou sobre o aumento de custos que: “Os aditivos são explicados pelo avanço dos projetos executivos, que têm identificado, com maior grau de precisão, as intervenções necessárias para a completude do projeto de interligação do São Francisco”. Ou seja, o custo inicial dos projetos não serve para muita coisa porque o que importa é o custo real identificado com o “avanço dos projetos executivos”.
Levantei no SIAFI a execução desse programa (1036: transposição de bacias hidrográficas) desde 2007. Como se observa na tabela abaixo, desde o seu inicio só conseguimos executar 57% do valor total autorizado do programa. Se isso acontece com uma das obras tidas como prioritária do PAC imaginem as outras.
Execução do Programa 1036: integração de Bacias Hidrográficas – R$ milhões correntes
Segundo, é verdade que o investimento público como % do PIB aumentou de 2007 a 2010. No entanto, como ficou claro, em 2011, parte desse aumento do investimento dependia de um conluio entre setor público e privado, em especial no Min. dos Transportes, que para as obras andarem tinham que pagar “pedágio privado” para alguns partidos políticos e lobistas ligados a esses partidos. Depois que houve a faxina, o governo sofre para retomar o crescimento do investimento público.
O que foi lançado hoje é apenas um plano. O plano está na direção correta como o PAC também era um programa com as melhores das intenções. Mas o histórico recente do governo no seu esforço de aumentar o investimento público pela via direta (orçamento da união) ou indireta (concessões) é ruim.
O investimento público do orçamento da União perdeu o seu dinamismo desde o ano passado e, no caso das concessões, o modelo democrático de tarifa barata para todo mundo não tirou os investimentos previstos do papel (ver matéria da folha de hoje).
O programa lançado hoje é para mim a prova que o PAC falhou. Ou talvez seja um sinal de sucesso do PAC que levou o governo a concluir que ele não tem capacidade de fazer os investimentos necessários para o crescimento do país. Mas mesmo concessão (ou privatização) de obras públicas para o setor privado exige planejamento e fortalecimento das agências reguladoras, algo que com certeza pioramos na última década.
O plano divulgado hoje, por enquanto, é um plano de boas intenções. Espero que dê certo e que o governo tenha sucesso no processo de licitação e que fortaleça o papel das agências reguladoras. Como brasileiro todos temos que torcer pelo sucesso do programa. Mas, por enquanto, é apenas mais um plano e sem o choro de uma atriz bonita.

A ignorancia impressa: a reserva constitucional de mercado para jornalistas

O corporatismo tem um brilhante futuro pela frente no Brasil, sobretudo aquele mais ignorante, perverso, idiota, prejudicial e negativo do ponto de vista da boa informação dos cidadãos, como todos nós.
A reserva de mercado do jornalismo de carteirinha, geralmente o mais medíocre, corre o risco de ser constitucionalizada, depois de ter sido ilegalizada pelo STF. Ou melhor, quem corre o risco somos nós, todos nós, já que os ignorantes ameaçam voltar, para maior desgraça da imprensa que ainda ficou livre das amarras do Estado.
Paulo Roberto de Almeida 

Abaixo o diploma de jornalismo

Lucia Guimarães
O Estado de S.Paulo, 13/08/2012
NOVA YORK - Faltei à formatura da minha faculdade. Fiquei pendurada porque tirei nota baixa em estatística, tive de fazer o crédito em recuperação e colei grau sozinha no meio do ano. Confesso que não me recuperei em estatística. Assim como não aprendi jornalismo na escola de jornalismo. Lembro dos professores complacentes, um lacaniano esquisito (pleonasmo?), um comunista feroz, uma preguiçosa que não preparava nada e flertava com alunos.
Só fui boa aluna até o fim do segundo grau. Faltava muito à aula na faculdade porque já trabalhava como repórter. Aprendi o ofício na redação.
Uma vez, não preparei o trabalho final de uma matéria e só me lembrei na manhã da última aula. Lavei um vidro de geleia, datilografei várias palavras e joguei o papel picado lá dentro. Sacudi e entreguei para o professor, dizendo que era um poema concreto. Tirei nota 8.
Obrigar o jornalista a ter diploma de jornalismo é como obrigar um cantor a tomar aula de voz antes de cantar no palco, uma violação da liberdade de expressão. Não que uma boa escola de jornalismo seja inútil, pelo contrário, a da Columbia University, aqui perto, é uma usina de grandes profissionais. Mas é uma escola de pós-graduação, você só é aceito se já escrever num nível cada vez mais raro na nossa imprensa.
As redações eram a lição de anatomia do jornalista da minha geração. Hoje é indispensável aprender técnicas do jornalismo digital. Jornalista deve estudar, acima de tudo, português e se educar em história, literatura, economia, ciência, filosofia e ciência política. Quem chega à redação passou pelo crivo de editores e competiu com seus pares, mesmo por um estágio.
Não compreendo por que um graduado em economia que escreve bem seria impedido de cobrir o Banco Central e substituído por um foca que pode ser facilmente enrolado, já que não decifra a informação financeira. Não fui capaz de questionar porta-vozes do governo quando tive que substituir colegas na cobertura da negociação da dívida externa em Nova York. Não entendia bulhufas dos comunicados.
O senador paraibano Cícero Lucena declarou, orgulhoso, pelo Twitter, que votou a favor da obrigatoriedade do diploma porque "democracia se faz com jornalismo ético, profissional e técnico". Sua excelência vai me desculpar, mas essa frase não passa pelo copidesque. O que tem a democracia a ver com a profissionalização do jornalista? E com sua capacidade técnica de fazer fotografia com foco? A ética começa ainda na primeira dentição, em casa, é aperfeiçoada durante a educação e é fundamental para qualquer profissão.
A democracia se faz com jornalismo, ponto. Quando Thomas Jefferson disse que era melhor ter um país sem governo do que um país sem jornais, a inspiração era o civismo, não o corporativismo. O baixo nível da maioria das escolas de comunicação é que erode a democracia porque joga milhares de jovens iletrados na vala comum do subemprego, fabrica profissionais despreparados para contestar o poder e investigar a corrupção num mundo cada vez mais sofisticado e falsificado pelo marketing. Não foi coincidência Charles Ferguson, ganhador do Oscar de 2011 por Inside Job, ter conduzido as entrevistas mais reveladoras já feitas sobre o crash de 2008. O homem se formou em matemática e fez PHD em ciência política, sabia o que perguntar.
A desculpa usada pelo senador sergipano Antonio Carlos Valadares - empresas de comunicação se opõem ao diploma porque querem contratar mão de obra barata - é absurda. A epidemia de cursos superiores de jornalismo alimenta a distorção de mercado que baixa os salários. Por que só o senador Aloysio Nunes Ferreira teve coragem de apontar a aberração constitucional do voto? Qual o motivo por trás da esmagadora maioria dos votos a favor?
E o que define para esses parlamentares a tal profissão, numa era em que qualquer um munido de smart phone pode narrar e fotografar um atentado no Afeganistão e apertar "enviar"? A diferença é editorial e o público vota no bom jornalismo selecionando onde deposita sua atenção. As empresas de comunicação que quiserem produzir seu conteúdo com mão de obra medíocre e barata terão na exigência do diploma sua maior aliada.
O jornalismo é um bem social importante demais para ficar nas mãos de jornalistas diplomados.

Capitalismo? De Estado? Certamente... - Financial Times


Financial Times, July 9, 2012 7:33 pm

Brazil: After the carnival

Brazilians are starting the debate on whether to embrace a state-led economic model
Drought in Amazon, Brazil, November 2010. The Amazon region faces a dry season every year, but the 2010 drought was the worst in over a century.©Eyevine
A hard walk: while many Brazilians rely on river ferries, much infrastructure of the same vintage is rickety and needs a massive overhaul
Chen Zhizhao, the newest addition to Brazil’s champion football club, Corinthians, already seems at home at the team’s training ground on the edge of São Paulo.
Recruited this year from a club in Guangzhou, southern China, the young footballer has quickly started speaking some Portuguese.

More

ON THIS STORY

ON THIS TOPIC

IN ANALYSIS

“Everything is good, the food and the air, the weather is good here,” he says.
Although the club claims he was recruited purely for his talent, most suspect the real role of Mr Chen, the first Chinese player to join a major Brazilian team, is to lift the club’s profile in China so that it can sell its distinctive black-and-white team merchandise there.
Corinthians may not realise it but, through its canny use of an area in which Brazil has a natural competitive edge – football – to tap the Chinese market, the club in its own small way is providing a pointer for a country whose economy suddenly seems to have lost direction.
Elsewhere, exporting success from such kinds of innovation has proved elusive. Over the past decade, Brazil has largely relied on exports of commodities such as soy and iron ore to fuel spectacular economic growth, which peaked at 7.5 per cent in 2010.
But this growth has slowed to a crawl and the world’s second-largest emerging market is expected to expand only 2 per cent this year. Much of its industry, in spite of a seemingly endless series of stimulus measures, has become globally uncompetitive. Only the consumer seems to be holding the fort but even here, there are signs of fatigue. Despite surging growth and investment, infrastructure and education have lagged behind and their weakness has prevented the country from realising its full potential.
After the first decade of the century, in which everything seemed to fall into place for Brazil, policy makers are now abruptly being forced to rethink the country’s strategic direction. The issue at stake: what kind of economy does Brazil want and how big the role of the state should be?
“We want to consume like US consumers, we want to have the public services of the Europeans but we want to grow like an emerging market, so something has to give,” said Ilan Goldfajn, chief economist at Itaú, Brazil’s largest private sector bank.
It is a question troubling not just Brazil but all emerging markets. With the European, US and Japanese models looking battered, there are few global gold standards left to guide policy makers through the gathering storm clouds. Indeed, the next few years will be critical for the direction of the world economy as each of the Bric nations – Brazil, Russia, India and China – is tempted to revert to old socialist or statist habits to protect jobs and markets.
“This is where you’ve got to navigate without a lighthouse,” says Raghuram Rajan of the University of Chicago and a former chief economist of the International Monetary Fund. The challenge, he says, will be for countries to take what has been learnt in the west without “abandoning the western model totally”. “How do you get the good side of markets without being exposed to the underside?”
Much of Brazil’s remarkable run of prosperity was characterised as the “Lula model” of development, named after former President Luiz Inácio Lula da Silva. During his two terms between 2003 and 2010, he saw the size of Brazil’s middle class increase by more than 30m people through welfare transfers, rising salaries and increased consumer credit.

As growth slows focus shifts to the home front

As in Brazil, so in other emerging economies: growth is slowing, and as it slows it is raising serious questions about the economic future of the developing world, writes Stefan Wagstyl. Growth in emerging markets’ gross domestic product will slow this year to 5.7 per cent, from 6.3 per cent in 2011, according to the International Monetary Fund.
That is well above the 1.4 per cent increase forecast for the developed world. But it is a hefty discount to the 8 per cent recorded up to 2008. The decreases are driven mainly by a slowdown in the developed world, principally Europe.
Commodity exporters, headed by Russia, have profited mightily from the price boom that followed the 2008-9 economic crisis. But the recent price fall is starting to hit their economies.
Developing countries also face growing domestic difficulties, however.
In India, for example, decades-old bottlenecks in infrastructure and labour supplies have kept inflation high, forcing the central bank to maintain high interest rates even at the cost of hurting investment. Elsewhere, notably China, Brazil and Turkey, there are concerns that recent loan growth – fuelled by sustained low credit flows from the west – has generated unproductive investments and will trigger rising bad debts.
Policy makers have contained these threats – so far. But slowing growth increases the dangers. Even a slight slowdown can exert a disproportionate impact on sensitive credit-fuelled sectors. Once a few investors run scared, others can quickly follow.
In the long run, the rise of the emerging economies is likely to continue. Investment flows to countries where it can achieve the best returns – and these are still to be found in the developing world with opportunities for low-cost exports and for local domestic market growth.
The developing world’s growing middle classes will not want to be denied their desire for western-level living standards. The pace of emerging market growth is likely to be slower than 8 per cent, however. It will also, most likely, depend less on exports to the rich world and more on emerging-world demand, both within countries and in expanding south-south trade.
However, the adjustment could be hard, especially for countries with poor reform records, not least Russia. Much will also depend on the availability of cross-border credit and investment. The bigger the financial shocks from the eurozone and other as-yet-unexploded financial bombs, the harder the transition will be.
Helped by the windfall of rising commodity prices, the country also tamed its old enemy, inflation, and reaped the benefits of macroeconomic stability, accumulating reserves of more than $370bn. It survived the 2009 economic crisis with gusto, posting the highest gross domestic product growth in decades in 2010.
Furthermore, this year President Dilma Rousseff, a taciturn technocrat compared with Mr Lula da Silva’s rough-edged unionist charisma, pushed unemployment down to record lows of below 6 per cent and increased the minimum salary. This has rewarded her with a staggering personal approval rating of 77 per cent.
But the Lula model, skewed towards state-led consumption, also lacked an effective strategy to increase the capacity of the country’s infrastructure or education systems to handle the surge in growth. Inflation, the nation’s longstanding curse, which hit 2,477 per cent in 1993, began to return, forcing the central bank last year to increase interest rates to levels that brought the party to an abrupt halt.
Brazil’s strong currency also squeezed industry, sending it into recession. Auto companies have begun suspending or laying off workers, while private banks are holding back on lending after defaults hit a record high during May.
“We are exactly in this turning point,” says Mr Goldfajn. “There was a need to decelerate the economy, so wages continued to rise but prices could not follow and that meant margins got squeezed.”
The slowdown, which is being worsened by softening commodity prices and the eurozone crisis, has reopened a debate about why Brazil seems unable to grow faster than its long-term trend growth of about 4 per cent before inflation kicks in.
Perhaps most disturbing is an astonishing lack of international competitiveness of many Brazilian industries, even in sectors that should enjoy a natural advantage.
Gerdau, Latin America’s largest steelmaker, blamed weak profit growth in its latest results on an increase in raw material prices – iron ore, mineral coal and scrap. This is even though Gerdau is based in a country that is one of the world’s biggest exporters of quality iron ore.
The company spoke of the “deindustrialisation” of the steel supply chain in Brazil, as cheap imports from Asia undercut its products. Indeed,Carlos Ghosn, chief executive of Nissan-Renault, complained last year that it was cheaper for him to import steel made in South Korea from Brazilian iron ore, than to buy local products.
Most critics also point to infrastructure, particularly Brazil’s roads and ports, as another impediment. The cost of exporting a container from Brazil is $900, more than double the price from China and 1.5 times that from India. Meanwhile, importing costs are almost triple that of China and nearly double that of India, according to the World Bank.
“It is a disaster, ships sometimes have to stop for 90 days,” Eike Batista, Brazilian oil and logistics billionaire, told an investor meeting this year.
The other huge bottleneck in Brazil is skilled and semi-skilled labour. In the global “Pisa” test measuring average reading and mathematics scores, Brazil ranks near the bottom of the league tables, behind many other developing countries.
Thanks partly to poor education, productivity in Brazil has increased by only 1.5 per cent a year over the past decade compared with 4 per cent in China, according to Marcos Troyjo, of Columbia University.
A shortage of local professionals is now affecting growth industries. Ricardo Guedes, head of recruiter Michael Page in Rio de Janeiro, says some clients in the booming oil industry have been so desperate to fill positions they will pay almost anything. “For a couple of positions, we don’t even mention salary.”
Many of Brazil’s problems, however, are not bad ones to have. They often stem from rapid economic growth, preferable to the stagnation afflicting Europe, the US and Japan.
Indeed, the crisis has cemented a consensus in Brazil about the need for greater investment. At current levels of about 19 per cent of GDP, investment is short of the 22 per cent Brazil needs to expand its economy at about 4 per cent a year.
The government’s response to this issue has been more constructive than in 2009, when it unleashed massive state lending, analysts say. This time it has encouraged the central bank to lower Brazil’s extraordinarily high benchmark interest rate – a legacy of its history of runaway inflation. This has fallen to a record low of 8.5 per cent and is expected to drop further this week.
Lower interest rates will help to foster greater investment in infrastructure. Until now, investors were able to earn such high returns from short-term deposits they had little incentive to invest in riskier, long-term infrastructure projects. In addition, companies could not afford to borrow long term because rates were too high.
“There is a clear perception we need to get the investment going, the difficulty is how,” Itaú’s Mr Goldfajn says.
Among the challenges are an unwieldy government bureaucracy and tax system– even when the funds are available for investment, projects often get stuck because of red tape. Vale, the country’s largest miner, for instance, complains that it takes more than three years to get environmental clearances for its mines.
There is also the problem of a lack of savings. Brazilians only save 16 per cent of GDP, a fraction of the levels in China and India. The Brazilian government is a big part of the problem – it taxes like a European government yet wastes most of it on salaries, pensions and interest payments. Brazilian public revenue is equal to about 36-38 per cent of GDP compared with about 25 per cent in South Korea.
But shrinking government will be hard. As analysts point out, big government is a choice the Brazilian voter has made. Even faced with the decline of the European economies, the average Brazilian is still more likely to opt for a state-led model, such as China, than pure US-style, free-market capitalism.
“It used to be that all of Latin America looked to Europe as its ideal model, and that one day Brazil, Argentina and Colombia would become a Portugal, Italy, Greece or Spain, if it was lucky. But now, given the eurozone crisis, that is no longer the case. And, increasingly, China is becoming a more attractive or plausible model,” says a Brazilian diplomat.
To fill the investment gap, therefore, Brazil must attract foreign capital. Foreign direct investment hit a record $66.7bn last year, up from $48.5bn in 2010, but outsiders will demand adequate returns to continue coming. In the long run, these returns can only come from improvements in productivity. Brazilians and Brazilian companies will need to work smarter and become more innovative.
Private sector initiatives, such as that on display at Corinthians, offer hope. Even here, however, some of the comments from Mr Chen on the differences he has noticed between Brazil and China say much about why South America will not be another Asia anytime soon.
“In China, not much people [are] interested in football. The children are studying too much.”
With additional reporting by John Paul Rathbone and Jonathan Wheatley in London

Petrobras ou PTbras? - Senador Aecio Neves

Haveria muitas outras coisas a dizer, mas estas são algumas, apenas umas poucas, que representam o custo PT para a nação brasileira; e ainda não se somaram todas as perdas para o país de uma gestão calamitosa em todas as esferas da vida nacional. Existe, claro, o custo financeiro, estrito senso, o custo-oportunidade, ou seja, o que se perdeu, e existe o custo moral, este incomensurável.
Paulo Roberto de Almeida 

“PTbras”

Senador Aécio Neves (PSDB-MG)
Folha de S. Paulo, segunda-feira, 13/08/2012
Nunca antes na história deste país a mais importante empresa brasileira serviu tanto aos interesses do governo e de um partido. O petismo praticamente “privatizou” a Petrobras, colocando em segundo plano os interesses da empresa e do Brasil.
A Petrobras não cumpre metas de produção desde 2003 e, com isso, perdeu receita de R$ 50 bilhões. Os prejuízos com a importação de gasolina e diesel neste ano já somam R$ 2,9 bilhões, valor 239% superior ao do mesmo período de 2011 (R$ 648 milhões).
De quebra, os preços artificialmente baixos da gasolina vêm inviabilizando o etanol. As importações de gasolina aumentaram em 370% em relação ao mesmo período de 2011. Mas as incongruências não param aí: o custo da refinaria Abreu e Lima (Pernambuco) -projeto em “parceria” com a venezuelana PDVSA, que ainda não aportou nenhum recurso na obra- multiplicou-se por dez, de US$ 2,3 bilhões para US$ 20,1 bilhões.
As refinarias Premium I e II (Maranhão e Ceará), previstas para 2013 e 2015, foram adiadas para 2017. Também em decorrência de atrasos crônicos, o Comperj mantém encaixotados equipamentos sofisticados à espera do porto e da estrada que dariam apoio logístico à obra e que não existem.
A Petrobras comprou uma refinaria em Pasadena (EUA) por US$ 1,18 bilhão, em duas etapas, quando a ex-sócia adquiriu o ativo por US$ 42,5 milhões sete anos atrás. Trata-se de uma valorização de 2.700%.
O navio-petroleiro João Cândido voltou ao estaleiro Atlântico Sul por erros de projeto e entrou em operação com dois anos de atraso. Há dúvidas sobre as demais encomendas, visto que o sócio detentor da tecnologia -a coreana Samsung Heavy Industries- abandonou a parceria e não há substituto.
Desde o processo de capitalização em 2010, o comportamento das ações da Petrobras ficou abaixo do Ibovespa. Agora, a presidente da empresa, Graça Foster, parece estar disposta a enfrentar os malfeitos herdados pelo petismo do próprio petismo, em uma década de desapreço pela gestão profissional. No entanto uma gestão com os diagnósticos corretos não será capaz de inverter esse quadro de deterioração se não houver uma mudança de orientação do governo DILMA, que é o acionista controlador, em relação à Petrobras.
Garantir maior transparência dos atos e motivações que definem as decisões da empresa é uma das questões que se colocam. Outro bom começo seria combater o aparelhamento a que a companhia vem sendo submetida. Uma empresa estratégica e complexa como ela não pode funcionar como moeda de troca pelo apoio de partidos ao governismo.
O maior desafio é, portanto, acabar com a PTbras e trazer de volta para os brasileiros a Petrobras.

Paraguay debe recurrir al Tribunal de Haya - Mercosur


PARLAMENTO DEL MERCOSUR
DELEGACION DE PARAGUAY
PARAGUAY DEBE RECURRIR A LA HAYA EN RECLAMO DE JUSTICIA

El Paraguay como país libre y soberano debe defender sus derechos ante todas las instancias correspondientes, en particular, la Corte Internacional de Justicia de La Haya y si bien  Argentina y Brasil,  no reconocen ésta jurisdicción para dilucidar  hipotéticas controversias entre Estados soberanos que entren en conflicto, el Uruguay, sí la admite , y de esta forma, constituye una sobrada razón para que Paraguay recurra sin más trámites a este Alto Tribunal en reclamo de justicia, peticionando se declare ilegal  e ilegítima  la decisión de los tres países citados de excluir arbitrariamente al nuestro del MERCOSUR.
La Corte Internacional de Justicia, que funciona desde 1946, es un organismo estructuralmente inmune a las corrientes ideológicas que dominan el escenario político mundial, y su misión se encuadra estrictamente al ámbito contencioso y/o consultivo que los países de la ONU someten a su fuero para su examen y ulterior resolución  de eventuales litigios que los enfrente.
En conocimiento, entonces, que los Tribunales de la ONU se circunscriben a administrar justicia con criterio equitativo e imparcial, no descartándose obviamente  casuales pero remotas liviandades del factor humano, la causa paraguaya, entendemos, será juzgada con la objetividad requerida, lo que entraña un probable éxito de nuestras pretensiones, considerando que en ambos contextos, el juicio político a Fernando Lugo, primero, y su arbitraria consecuencia, la ilegal suspensión  del bloque regional,  el  Paraguay lleva la impronta victoriosa por el volumen de los testimonios y evidencias arrojadas por el inadmisible atropello de Argentina Brasil y Uruguay de las normas regionales y de los mandatos expresos del Derecho Internacional.
Un agravante voluminoso que condena irremediablemente al actual gobierno charrúa, son las expresiones de su presidente, José Mujica, que en plan de justificar la decisión de suspender temporalmente a Paraguay de sus derechos de participar de las deliberaciones de los órganos constitutivos del proceso de integración, comete el garrafal desliz de confesar públicamente que lo político primó sobre lo jurídico, usurpando, con esa rotunda enunciación, la potestad innata del Derecho para ventilar controversias en el MERCOSUR, subordinándolo bastardamente a las conveniencias políticas de los gobernantes de turno. 
La Presidencia de la Delegación  Paraguaya en el Parlamento del MERCOSUR, exhorta al Poder Ejecutivo, que  a través del Ministerio de Relaciones  Exteriores,  a que indefectiblemente instaure una acción contra su homólogo del Uruguay, que, en esta emergencia, cargará con todo el peso de las imputaciones promovidas por el demandante, visto que Argentina y Brasil quedarán exceptuados, salvo que presten su Acuerdo para sentarse en el banquillo de los acusados junto al demandado.
El  caso paraguayo,  dejará a no dudarlo, un precedente de hierro en la  comunidad internacional, forzando a los díscolos líderes que aún perviven en los dos hemisferios a meditar concienzudamente la eventual adopción de medidas que vulneren el Estado de Derecho, quebranten la jurisprudencia Internacional y ofendan el régimen de democracia 
representativa escogida por los miembros de la ONU.Al gobierno  brasileño le refrescamos la memoria: su  país alberga dos sueños dorados, ingresar al selecto grupo económico del orbe, meta parcialmente lograda, e integrar el Consejo de Seguridad de la ONU con carácter permanente, emparejado nada menos que con Estados Unidos, Rusia, China, Francia y Reino Unido de Gran Bretaña,  potencias 
militares del planeta, objetivo todavía  inasequible pero irrenunciable para el ambicioso vecino. La Corte Internacional de Justicia es, al lado de la Asamblea General y el Consejo de Seguridad, uno de los tres pilares institucionales de la ONU, y un fallo dictado por sus autoridades, invariablemente inapelable y de prerrogativa moral mayúscula, indefectiblemente honrará la reputación del inocente, escarneciendo la aureola del culpable, quien  tendrá que forzosamente sufrir las seguras secuelas de sus arrogantes despropósitos y de la inconducta lesiva y violatoria del orden jurídico internacional.

Agosto de 2012
Parlamentario ALFONSO GONZALEZ NÚÑEZ
Presidente

Interventionist Brazil: State acknowledges its inneficiency

Brazil changes tack with new stimulus plan




Brazil's government is set to launch the first in a series of measures that could inject up to $50bn (£32bn) into the economy over the next five years. The first part of the plan, to be announced on Wednesday, includes privatising about 14,000 kilometres of railways and roads.
The privatisation of ports, lower energy costs and incentives for industry will soon follow.
The package is designed to boost what have been disappointing growth levels.
President Dilma Rousseff has invited 50 leading Brazilian businessmen to the capital Brasilia where she will personally launch the new strategy.
In May, she brought the businessmen to the presidential palace - the Planalto - to ask them what was needed to stimulate the economy.
Growth in Brazil is predicted to be under 2% this year, the weakest annual performance since 2009 and a sharp slowdown from an impressive 7.5% rise in 2010.
Rising debt rates Prior to these measures, the government had been counting mainly on rising levels of domestic consumption - fuelled by credit growth and rising income among poor Brazilians - alongside investments by state companies.
Although the previous strategy had helped Brazil become the sixth largest economy in the world in 2011, overtaking Britain, the government has not been able to maintain high growth rates.
The recent weak growth has been attributed mainly to rising debt rates among the population and the global downturn, which reduced demand for Brazilian products.
Expensive energy, poor infrastructure and increasing labour costs - known here as 'Custo Brasil' or the 'Brazil Cost' - have also weighed on growth, analysts say.
Now the government will increase the role played by private investors, who were seen to have lost ground during the government of Luiz Inacio Lula da Silva, Brazil's president from 2003-2010.
President Rousseff was his chosen successor, but she is seen as a tough and pragmatic decision maker when it comes to economic policy.
In February, the government granted three of the largest airports in the country to private companies, hoping to improve overstretched facilities before the 2014 Football World Cup.
Boosting investment Now roads, railways, ports and perhaps other airports will also be privatised. President Rousseff hopes these concessions will also help to improve the country's much-criticised infrastructure.
"The government realized that privatisations are a way to boost investment", says Felipe Salto, an economist at Tendencias, a leading consulting firm in Brazil.
The concessions are expected to attract up to $50bn in investments in five years.
Rousseff is also preparing to lower the price of energy for industry with the abolition of some federal taxes, which could cut the price by 10%.
Further extensive reductions would depend on tough negotiations with governors and politicians across the country.
Economists are worried, however, about a new round of tax reductions for industry that should be announced in the coming weeks.
"Without structural changes, they could even generate demand and short-term growth, but also cause higher inflation", says Mr Salto.
The measures, he says, would also affect the fiscal balance.
"Comprehensive stimulus measures could harm the efforts to bring down public debt, leading to imbalance in government accounts."
Late diagnosis For economist Silvia Matos, professor at Getulio Vargas Foundation, "the new package shows that the government is convinced that the economy faces a structural problem.
"The diagnosis is correct, but took too long to be made."
According to Ms Matos, previous economic steps taken by the government this year, such as reducing taxes on cars, were not enough to lift GDP.
Not even the recent devaluation of the currency, the real, and the progressive reduction in interest rates, have produced significant effects so far.
According to the National Confederation of Industry, 11 of the 19 industrial sectors they were tracking suffered a drop in capacity in 2011, indicating a cooling in industrial activity.
Ms Matos believes the new package will tackle some key economic problems, but says Brazil faces other serious issues such as increased public spending and an inefficient tax system.
Without reforms in these areas, she says, the country's economy will remain vulnerable.

Tragedia educacional brasileira: desempenho recua

Escolas particulares não atingem meta do Ideb

São Paulo é um dos três Estados do País que ficaram abaixo do índice estipulado pelo MEC

Bruno Deiro, de O Estado de S. Paulo, 15/08/2012

No ensino médio da rede particular, 60% dos Estados do País não atingiram a nota mínima esperado pelo governo no Índice de Desenvolvimento da Educação Básica (Ideb). Para piorar, dois terços dos 20 Estados avaliados em 2009 apresentaram queda ou mantiveram a mesma média no levantamento divulgado nesta terça-feira, 14.
No ensino fundamental, a situação é menos preocupante. No ciclo de 1.ª a 4.ª série, 33% não atingiram a meta e apenas dois Estados tiveram queda de rendimento. Já entre os alunos de 5.ª a 8.ª série, metade das escolas avaliadas melhorou sua média.

Para especialistas, os números do ensino médio são frustrantes pelo fato de não refletir as vantagem que os alunos da rede privada têm em relação aos que estudam em escolas públicas.

A professora Silvia Colello, da Faculdade de Educação da USP, aponta que a falta de investimentos na atualização dos professores ajuda a explicar o mau desempenho. “As escolas particulares estão em um momento difícil de assegurar clientela e garantir a qualidade que demanda. Cobram mensalidades altas, mas funcionam como empresa e não valorizam o professor”, afirma.
Rede paulista
São Paulo é um dos três Estados do País que ficaram abaixo da meta do governo para escolas privadas nos três níveis avaliados pelo Ideb, ao lado do Distrito Federal e de Pernambuco. Nos últimos dois anos, no entanto, apenas o ciclo da 1.ª a 4.ª série não apresentou melhora na rede paulista.
Acompanhe a cobertura completa do Ideb 2011 no Estadão.edu