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sexta-feira, 16 de agosto de 2019
Marcos Troyjo sobre acordos comerciais, Mercosul e Argentina (Clarin)
Paulo Roberto de Almeida
*Entrevista de Clarín con Marcos Troyjo, viceministro de Economia para Comercio Exterior y Asuntos Internacionales de Brasil*
“No hay ascenso económico sin una relación especial con Estados Unidos”
Para el negociador del acuerdo Mercosur-UE, el convenio le impone al bloque medidas impostergables para ganar competitividad.
CLARÍN
Domingo, 11/08/2019
GUIDO NEJAMKIS
Bajar el nivel de protección de las economías del Mercosur, avanzar hacia el libre comercio de automotores dentro del bloque y prepararse, con reformas estructurales, para aprovechar las oportunidades que ofrece el acuerdo con la Unión Europea. El viceministro de Economía para Comercio Exterior y Asuntos Internacionales de Brasil, Marcos Troyjo, en esta entrevista con el Económico, afirma también que, transitando ese rumbo, la mayor economía de América Latina se prepara para un crecimiento sostenido, que deje atrás “los vuelos de gallina”. Economista, politólogo y diplomático de carrera, Troyjo tiene una maestría y un doctorado en Sociología de las Relaciones Internacionales por la Universidad de San Pablo (USP) y un posdoctorado en la Universidad de Columbia, donde fue profesor por cerca de una década. Ahora, en el gobierno de Brasil, es la mano derecha para asuntos de comercio exterior del ministro de Economía, Paulo Guedes.
Clarín —Brasil ejerce en este semestre la presidencia pro-témpore del Mercosur. ¿Cuáles son las prioridades para el bloque?
Troyjo —El origen de la UE fue un acuerdo de carbón y acero con algunos países para después consolidar, con más países, un área de libre comercio. Luego se da un paso mayor a una unión aduanera. En el Mercosur fuimos directamente a una unión aduanera. Es natural que eso haya generado distorsiones. Una de ellas es un Arancel Externo Común (AEC), que se convirtió en un instrumento de aislamiento y no en una herramienta de integración. Trabajamos con nuestros socios del bloque para modernizar el AEC. Queremos trabajar para crear una cronología y una metodología que gradualmente baje el nivel de protección de nuestras economías.
Clarín —El AEC está actualmente en 14%. ¿La idea es reducirlo a qué nivel?
Troyjo —La idea es disminuir mucho, a un promedio de 5%, 6%. El tiempo para eso dependerá un poco de las negociaciones que estamos haciendo con otros bloques. Las prioridades son modernizar la estructura arancelaria, aumentar su cobertura, disminuir el nivel arancelario.
Clarín —¿Podría explicitar, a su juicio, cuáles son las ventajas principales del acuerdo con la UE?
Troyjo —El acuerdo es un verdadero divisor de aguas. Siempre estuvimos muy concentrados en el antiguo modelo de industrialización por sustitución de importaciones. En sectores en los que el Mercosur tiene ventajas comparativas, como la producción y exportación de proteína animal, la nueva fase hará que vendamos cerca de cuatro veces más carne vacuna a la UE que Estados Unidos y Australia juntos. Con una buena estrategia, vamos a conseguir utilizar los recursos incrementales que vendrán de esa nueva situación exportadora para construir agregación de valor. Eso es lo que el acuerdo va a traer.
Clarín —¿Pone a sectores productivos en riesgo?
Troyjo —Los grandes riesgos para el Mercosur son realizar grandes acuerdos de comercio internacional pero no hacer reformas estructurales que aumenten la competitividad. Este es el punto clave. El gran acuerdo que Brasil tiene que hacer, y tal vez esto valga para Argentina, es con sí mismo. Una de las mejores cosas que tiene el acuerdo con la UE es la ventana cronológica para adaptarnos. Si no comenzamos ahora con esas reformas, el tiempo pasará rápido y llegaremos sin las condiciones necesarias para aprovechar al máximo el potencial que el acuerdo nos ofrece. Estos acuerdos exigen mucha adaptación de los sectores económicos más ineficientes. Con el acuerdo con la UE, nuestras economías jugarán el mundial del comercio internacional. Hay que prepararse.
Clarín —¿Puede haber libre comercio automotor Mercosur-UE en 15 años sin libre comercio del sector en el Mercosur?
Troyjo —En mi opinión, no tiene sentido. Es por eso que estamos conversando, trabajando, con nuestros socios argentinos en la construcción de un calendario de liberalización comercial del sector automotor, para que pueda desempeñar efectos multiplicadores en la recuperación del crecimiento económico en Argentina y en Brasil. También para que cada vez más el sector esté a la altura del desafío de la integración con una de las economías más avanzadas en ese segmento, que es la europea.
Clarín —El principal candidato de oposición en Argentina dijo que revisaría el acuerdo con la UE. Si gana el kirchnerismo, ¿habrá problemas para avanzar en la instrumentación del acuerdo?
Troyjo —Alentamos la reelección del presidente Macri, quien junto con el presidente Bolsonaro fueron los grandes protagonistas del logro que conseguimos con la UE. Mi proyección es que cualquiera que ocupe la Casa Rosada después de las elecciones hará muy poco para cambiar lo que fue negociado en Bruselas. Por una razón: las ventajas son muy grandes para nuestras economías. No sólo por los efectos mensurables como más exportaciones y más importaciones de calidad. También por los aspectos de reputación, para alcanzar objetivos como ingresar a la OCDE, obtener mejores financiamientos para proyectos de inversión. Mi perspectiva es que quien gane la elección en Argentina no hará movimientos negativos respecto a la trayectoria de aprobación parlamentaria del acuerdo.
Clarín —En Argentina los empresarios se quejan porque Brasil compra poco. ¿Cambiará eso en el corto plazo?
Troyjo —Brasil pasó por la peor recesión económica de su historia. Llegamos al fondo del pozo, con casi 30 meses de una retracción económica brutal. Eso trajo consecuencias, pero Brasil volvió a crecer. Ahora lo que importa es cómo. La reforma jubilatoria proyecta una salud fiscal muy importante. Las tasas de interés están en el menor nivel de su historia. Es probable que esa trayectoria continúe. Trabajamos para tener un Banco Central independiente. Eso aumenta la institucionalidad de la economía y facilitará más el acceso a capital de largo plazo, de calidad y de baja remuneración. En las próximas semanas comienza el ciclo de la reforma tributaria, que atacará la complejidad del sistema impositivo. Tendremos un proceso vigoroso de privatizaciones. Todo eso aumentará la eficiencia de la economía. Estamos abandonando en algunas empresas como Petrobras prácticas de (exigencias de) contenido local que creaban obstáculos para invertir. Estamos haciendo una reforma del Estado. En materia de crecimiento, Brasil está dejando los vuelos de gallina para pasar a un vuelo sustentable y de largo plazo.
Clarín —El gobierno de Brasil explicitó que busca un acuerdo Mercosur-Estados Unidos, pero la visita del secretario de Comercio Wilbur Ross dejó claro que eso no será fácil ni rápido. ¿Cuál es el camino a recorrer en este tema?
Troyjo —No hay ascensos económicos importantes en los últimos 70 años sin un relacionamiento económico especial con Estados Unidos. Así fue con Alemania, con Japón, con China, con Corea del Sur. Es de interés del Mercosur, a mi modo de ver, tener más y mejores relaciones económicas con Estados Unidos. Allí la conducción del comercio exterior exige que para que el Poder Ejecutivo comience negociaciones, tenga la Autoridad de Promoción Comercial (TPA, según sus siglas en inglés) concedida por el Congreso. Eso ya está dado y vence en junio del 2021. Entonces podemos perseguir la vía arancelaria. Vamos a reunirnos con nuestros colegas del Mercosur, pensar, evaluar, ver si es factible. Es un tipo de acuerdo que lleva tiempo y consume energía. Si no involucra aranceles, no requiere negociar en bloque. En ese caso, del lado de Brasil, podemos tener una conversación bilateral y avanzar en facilitación de comercio, convergencia regulatoria, propiedad intelectual, o sea, podemos avanzar mucho.
https://www.clarin.com/economia/ascenso-economico-relacion-especial-unidos_0_0GAd0RmkV.html
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